Por la vida naciente

Se llama con hipocresía interrupción de la maternidad y se justifica para prevenir abortos clandestinos. El aborto es más bien un asesinato premeditado con el agravante de que la víctima no puede defenderse. Por como se aplica, la ley 194 ha decidido que la madre puede hacer lo que quiera al hijo: matarlo o mantenerlo con vida.
Así que el hijo no tiene derecho, es como un objeto, se puede tirar a la basura. Sin embargo, ninguna mujer quiere matar a su proprio hijo, pero lo hace escondiéndose detrás de una falsa excusa: “no puedo quedarme con él”. Pero, si la ley 194 se aplicara en los artículos que protegen el embarazo y la vida, la mujer encontraría los recursos para ser madre de su hijo y no pediría más
de suprimirlo” Padre Oreste Benzi

Contra la inducción del aborto

Estamos seguros de que una madre nunca quisiera abortar su bebé. Siempre hay alguien o algo que la induce a hacerlo. Hay personas que no quieren al bebé porque interfiere con sus proyectos, porque es una fuente de vergüenza, porque te obliga a asumir la responsabilidad. Las presiones a menudo disfrazadas de consejos para bien de la futura madre, que se traducen en amenazas, chantaje emocional, engaños y violencias.

Adopción, el último recursos

La ley italiana protege a las madres y los recién nacidos, permitiendo a cualquier mujer de dar a luz sin reconocer su proprio hijo, también permaneciendo en el anonimato para permitir al niño de ir rápido en adopción. En el certificado de nacimiento se escribirá  “nacido de madre que no quiso ser identificada”.

Si usted está en problemas y piensa que no puede criar al niño que lleva, podemos darle información sobre los reglamentos, los procedimientos a seguir y la identificación de la unidad de salud más adecuada y cercana a usted. Estamos dispuestos a ayudar, también acogiéndote lejos de casa si la situación lo requiere. Ofrecemos apoyo psicológico para ayudar a tomar la mejor decisión.

Soporte post-aborto

Tratamos de ayudar a las madres en dificultad en la gestión del embarazo, tanto las mujeres que pidieron la interrupción voluntaria del embarazo (aborto) y más tarde cambian su decisión, como las madres que ya abortaron y necesitan ser escuchadas y no juzgadas, madres que necesitan dar un nombre a ese grupo de trastornos resultantes de un aborto y necesitan hacer un camino psicológico con el fin de llegar a un duelo real.

Aborto Eugenésico

Rechazamos el “aborto terapéutico” ya que no representa una terapia y también condenamos el aborto eugenésico, destinado a matar a todos aquellos fetos humanos que presentan diagnósticos prenatales con problemas o infaustos, seleccionando y juzgando lo que es digno de vivir y lo que no.

Ofrecemos soporte de una manera concreta a esas madres y padres que deseen aceptar la vida en todas las circunstancias, para que se sientan bienvenidos, apoyados y no dejados solos a vivir sus vidas.

Oración por la vida naciente

En 1999, el Padre Oreste Benzi inició la oración por los no nacidos frente a los hospitales de Rimini, el día y la hora en la que se practica el aborto legal. Convencida de que los que guardan silencio ante esta masacre silenciosa son cómplices en el asesinato de estas criaturas, la Comunidad se encuentra periódicamente para orar delante de algunos hospitales italianos donde se practica el aborto. Gracias a esta presencia se han salvado muchas “pequeñas” vidas.

Para los que desaprobaban la oración en la acera, el Padre Oreste respondía: “No podemos no presenciar en el lugar del martirio de tantos pequeños inocentes para acoger su petición de auxilio permaneciendo bajo la cruz y rogar a Dios que ponga fin a este masacre. Con nuestra presencia queremos estar al lado de sus madres también y salvarlas de la herida indeleble del aborto, dándoles toda la ayuda necesaria para que tengan una condición digna para acoger al niño que ya vive en ellas. Voy a orar públicamente para llamar la atención del pueblo delante de Dios con el acto más grande que es orar y pedir misericordia para aquellos que están matando”.